LA CONCIENCIA ÉTICA EN EL ÁMBITO FAMILIAR,
PROFESIONAL E INVESTIGATIVO
Con este ensayo se pretende hacer una reflexión en relación a las 2 lecturas recomendadas sobre “el plagio en el trabajo científico de Rojas Soriano y sobre “Los siente saberes necesario para la educación del futuro”, de Morín en los capítulos VI y VII, aplicándolas en el ámbito familiar, profesional e investigativo. Tales lecturas han despertado el deseo principalmente de hacer un análisis personal de mi actuar, de mi propia vida en los diferentes ámbitos y de reflexionar cómo es que puedo aplicarlo a mi labor educativa, lo cuál para ello es necesario hacer investigación para saber cuáles son las dificultades, los problemas por los que nuestros ambientes están carentes de ética, el por qué desde que el niño entra en uso de razón adquiere hábitos no favorables que les llevarán a crecer más sanamente y de una forma integral, pero principalmente me han invitado a analizar mi actuar como estudiante y profesionista.
Ya en el módulo propedéutico se reflexionó sobre el por qué se dice que se plagio un trabajo, una idea, etc., Ciertamente como dice Rojas Soriano en su artículo: “Formación de investigadores educativos”(1992), muchas personas lo hacen deliberadamente y otras desconocen las reglas para escribir cualquier tipo de investigación. Lo cierto es que falta dentro de la formación profesional éste tipo de instrucción. Aunque pensándolo bien, en nuestra educación como nación propiamente no se educa a la honestidad, desgraciadamente desde pequeños aprendemos a ser deshonestos en muchos aspectos y esto porque los adultos no lo enseñamos con el ejemplo. Ahora, gracias a los medios de comunicación sabemos todos, niños y adultos lo que significa plagiar un escrito, una canción, una frase, etc., todo lo que no sale de nuestro intelecto como fruto de una investigación no es propio y hay que darle el crédito a quien lo merece y eso es ética y nosotros los docentes tenemos esa obligación de educar a las nuevas generaciones.
Dice Rojas Soriano (1992): El hecho de plagiarse los planteamientos de un autor constituye un acto de deshonestidad intelectual ya que, por un lado, no se proporcionan los créditos a los autores cuyos libros, artículos o documentos, son utilizados para desarrollar nuestras propias ideas. Es muy fácil, sobre todo para los que no tenemos la facilidad de palabra tanto escrita como oral, tomar algunas frases o palabras de base para partir de ahí y poder expresar algo de lo nuestro, pero siempre estamos con la tentación y la inseguridad de saber si lo que se escribe esta bien, si tendrá coherencia, claridad, sencillez, etc., y entonces tomamos algunas frases o palabras que creemos que si están escritas por autores renombrados nuestro escrito tendrá mayor aceptación o calificación y realmente no sería deshonesto usarlas, lo importante es reconocer al autor y a partir de ellas aportar las propias ideas.
En el texto de Morín (1999), que nos habla sobre enseñar la comprensión, lleva a reflexionar a los que estamos en el ámbito educativo, el como se puedo hacer para que los alumnos comprendan no solamente intelectualmente, sino humanamente. Podría agregar aquí que la misión de la Institución en la que laboro, es “formar al buen cristiano y al honesto ciudadano”, misión que abarca la formación integral del educando como el aspecto: social, intelectual, moral, humano y espiritual. Misión que en este siglo no es fácil llevar a cabo por las carencias sobre todo de la unidad familiar que es donde principalmente se educa en estos aspectos.
San Juan Bosco (1815-1888) un gran pedagogo es fundador del Sistema Preventivo[1], por el cual enseñaba a sus muchachos a ser personas con valores, con ética, Don Bosco, como lo llamaban todos, educaba verdaderamente para la comprensión humana.
La comunicación es otro elemento que ciertamente lleva a la comprensión de la realidad del muchacho. El sistema educativo nos lleva a conocerlos personalmente, a una verdadera comprensión intelectual u objetiva y a una comprensión humana intersubjetiva, así como menciona Morín (1999) en el capítulo VI.
El ruido, la polisemia, la falta de conocimiento de una cultura, la incomprensión de los valores imperativos, de los éticos propios de una cultura y la estructura mental a otra según lo menciona Morín (1999), crean el malentendido o el no entendimiento y esto lleva a la incomprensión, a la falta de comunicación. Pero, en la educación éstos obstáculos se pueden eliminar cuando se llega a la comprensión humana, en donde se hace conciencia a los alumnos de su situación actual, de su contexto, su situación familia, social y se les ayuda a salir de su egocentrismo de su self-deception (Morín 1999), tan marcado actualmente por la falta de valores en la familia y en la misma sociedad en la que se desarrolla.
El acompañamiento[2] es una estrategia muy valiosa en éste punto, pero requiere de tiempo completo del educador y de parte de los educandos requiere disciplina y renuncia a sí mismo. Es necesario primero aprender a comprendernos a nosotros mismos para comprender a los demás y así evitar el etnocentrismo y sociocentrismo.
Dice Morín que la comprensión nos pide, no encerrar, no reducir al un ser humano a su crimen, aunque sea un criminal. Me gusta la frase, suena bien, pero que difícil ponerla en práctica porque estamos tan deshumanizados, tan mal comunicados que ciertamente tachamos a muchas gente de criminal, hasta a nuestros mismos alumnos sombre todo cuando decimos: “Juanito no es responsable, nunca hace nada, no trae tarea, etc”., lo adornamos tanto, que acabamos con su persona y no nos damos la oportunidad de conocer las causas por las que dicho alumno comete tal error. En estos casos necesitamos y necesito actuar verdaderamente con ética, con humanidad.
Según Morin (1999), la ética de la comprensión es un arte de vivir que nos pide, en primer lugar comprender de manera desinteresada. Actuar con ética es comprender escuchando, perdonando, alentando, no acusando, reprochando, porque entonces no estamos comprendiendo humanamente.
Como dice Morín (1999) que lo que favorece la comprensión es: “El “bien pensar”; modo de pensar en donde se aprehende en conjunto el texto, el ser y su entorno, lo local y lo global, lo multidimensional, en resumen, lo complejo, es decir, las condiciones del comportamiento humano”. Es de mucha ayuda el auto examinarnos porque en la medida en que me comprenda, comprenderé a los demás. La crítica destructiva, la envida, la prepotencia, etc., a veces son más fuertes y nos impide pensar bien del otro.
En el ámbito educativo es importante estar sobre nosotros mismos y así actuar justamente sobre todo con los adolescentes ocurrentes. Simpatizar con los otros es otro medio que favorece la comprensión que consiste en ser abiertos con todos, no tener privilegios con determinadas personas, comprendiendo aún a aquéllas que nos son extrañas. Otro es el ser tolerantes que de manera general consiste en aceptar las ideas o costumbres a veces contrarias a las nuestras; un segundo grado de la tolerancia es respetar las ideas antagónicas a las propias; un tercer grado según Morín(1999) es la que pertenece al concepto de Niels Bohr, de que hay una verdad en la idea antagónica a la nuestra, y es esta verdad la que se debe respetar ; el cuarto grado es referente a las enajenaciones humanas, mitos, ideologías, ideas, dioses, etc.
En relación a la comprensión, ética y cultura planetarias, podemos decir que cada cultura tiene su riqueza y cada una puede aprender de la otra sin quitarle su origen, sus tradiciones, siempre ver a las otras culturas con mentalidad abierta, con democracia y respetarlas para que así respeten la nuestra.
La concepción compleja del género humano comprende la tríada individuo-sociedad-especie. Los individuos son más que el producto del proceso reproductor de la especie humana, pero este mismo proceso lo producen los individuos de cada generación. (Morín 1999). Ciertamente como dice más adelante, que esta triada es inseparable ya que son comproductores el uno del otro, uno es fruto del otro y no existiría la sociedad si no hubiera individuos y nos habría individuos si no hubiera especie y así sucesivamente. También dice que ética humana, la antropoética como la llama es la base para enseñar a las nuevas generaciones la ética. Dice que la antropoética llevará a la humanidad a tomar conciencia de su humanidad y ciudadanía planetaria, cosa que hoy en nuestro tiempo es muy necesario educar en nuestros alumnos ya que cada vez se deshumaniza y olvida la responsabilidad que tiene para conservar el planeta en donde habita.
La Humanidad, de ahora en adelante, es una noción ética: ella es lo que debemos realizar todos y cada uno. (Morín 1999).
Así pues concluyo diciendo que la educación es verdaderamente un medio seguro para civilizar a la humanidad, es el ambiente en donde se forman las generaciones del futuro y nuestro compromiso como educadores es acompañarlos en sus procesos de desarrollo, es necesaria una reforma de pensamiento, la antropoética, el verdadero humanismo, la conciencia de tierra-patria reduciría la ignominia en el mundo (Morín 1999). Despertar el sentido de pertenencia y corresponsabilidad en las nuevas generaciones a través de la educación, de las nuevas tecnologías, es una oportunidad para vivir en sentido democrático, es una oportunidad para crear una nueva Humanidad en donde se desarrollan de acuerdo a la tríada individuo-sociedad-especie. No olvidemos que se educa con el ejemplo más que con las palabras, es necesario comprender, acompañar, humanizar a las nuevas generaciones si queremos que su futuro sea mejor que el nuestro.
R E F E R E N C I A S
Édgar Morín, “Los siete saberes necesarios para la educación del futuro”, Correo de la UNESCO, 1999.
El Sistema Preventivo de Don Bosco. Recuperado el 16 de febrero de 2011 de: http://www.salesianosbilbao.com/modulos/usuariosFtp/connrecu/recursos3196a.pdf
Instituto Hijas de María Auxiliadora. (2006). Para que tengan vida y vida en abundancia (Cap. 5, p.74). Madrid: Editorial CCS.
Rojas Soriano, R. Formación de investigadores educativos. Edit, Plaza y Valdés, México 1992.